El otro día —ya no recuerdo cómo, pero seguramente mientras estaba desvelada—, me topé con una noticia interesante que quiero compartirles. La universidad española de Granada había conducido un programa para evaluar el desarrollo neurológico de los bebés y encontró que en el agua de una piscina, es decir, mediante la natación, los bebés participantes demostraban un progreso en su sistema cardiológico y circulatorio, en el sistema inmune, y hasta...